Ponga a hervir en medio litro de agua dos cucharadas grandes de flores de manzanilla hasta que el agua reduzca a la mitad. Baje del fuego y agregue dos cucharadas de agua oxigenada y el jugo de un limón grande. Todas las noches moje sus dedos en esta preparación y páselos por el cabello a manera de peine. El cabello conservará su color rubio o claro.